LÓPEZ-GATELL EXPLICA FOTO EN ZIPOLITE Y REPORTERA DE MILENIO ESTALLA
POR POLEMÓN
A veces las conferencias vespertinas están vacías de reporteros. Hoy no. Hoy había morbo, mucho morbo, enorme morbo.
Las preguntas iban a estar enfocadas en un tema, y no necesariamente tenían que ver con la pandemia, sino con la vida privada del subsecretario de Salud, Hugo López Gatell.
La pregunta estaba prácticamente ya dada: ¿Por qué Hugo López-Gatell estaba en Zipolite? El raiting de la vespertina de hoy, pues, no fue poco.
La respuesta de Hugo López-Gatell fue simple, y al mismo tiempo contundente:
“Fui a la costa de Oaxaca, a la región de Pochutla, a San Pedro Pochutla, un pueblo precioso. Fui a visitar a familiares muy cercanos, estuvimos en una casa particular en los días de fin de año”. Indicó que durante toda su estadía guardó los protocolos para evitar contagios.
Y ahondó aún más en la polémica foto: indicó que acudió a un restaurante, y que lo pudo hacer porque en Oaxaca estaba en semáforo naranja, y no en rojo.
López-Gatell indicó que en redes sociales y en una parte de la prensa mexicana, a esta salida a pasar año nuevo con su familia a Oaxaca se le dio un matiz de interés público, cuando en realidad era una tema de su vida privada.
Continuó López-Gatell explicando la cuestión a nivel general, pero fue interrumpida por la reportera de Milenio, Blanca Valadez, quien a punta de gritos le exigió que le dijera por qué estaba en Zipolite.
López-Gatell le pidió paciencia para cuando fuera su turno: “permítame, permítame…”, pero la reportera continuaba hablando e indicando que era muy importante que explicara por qué estuvo en Zipolite. Otros reporteros le pidieron a Blanca que se tranquilizara.
López-Gatell, sorprendido, indicó que estas interrupciones no habían sucedido, y que no se oculta información, pues siempre se podría hablar del tema, mañana, el miércoles, toda la semana, pues la vespertina es todos los días, de lunes a domingo.
Y así, entre el morbo, terminó una conferencia de prensa vespertina mas (van más de 200), donde el tema no fue una cuestión pública, sino la vida privada de Hugo López-Gatell, quien se ha convertido por absurdo que parezca, en una bandera de golpeteo de la oposición a AMLO.
