Disculpen las molestias, pero estamos transformando al país…

Comparte esta entrada
  •  
  •  
  •  
  •  
  •  

| Sinlíneamx.com | En la opinión de Elí González, @calacuayoMX

A partir de la ruptura histórica sucedida en México en las pasadas elecciones de 2018, nuestro país está viviendo un proceso de regeneración del poder político, dejando atrás la inoperancia del estado como ente social y público.

La decadencia de la clase política que se mantuvo en el poder por más de 100 años, y que aún se resiste a perder los privilegios particulares que le aportaba el poder público, está transformándose en el triunfo del México olvidado, arrinconado y humillado.

Es precisamente esa ruptura histórica la que hoy produce un escenario de superación y de regeneración del poder público y político. La politización de la sociedad mexicana, es lo que ha permitido que la transformación se esté llevando a cabo de manera pacífica.

Sin embargo, las fuerzas reaccionarias de la clase conservadora, del poder mediático y económico no están dispuestas a ceder el poder ejercido durante todo el período del México posrevolucionario, concentrado en las manos del 10% de la población mexicana el 78% de las riquezas de México. Es por eso que atacan como fieras rabiosas con tal de recuperar lo que se les fue de las manos hace exactamente 3 años.

¿Qué existe polarización? Si, y que bueno que exista tal polarización. Así es más fácil identificar a cada uno en el bando que le corresponde. Así podemos identificar más fácil los medios empleados para desacreditar al gobierno del cambio que representa Andrés Manuel López Obrador.

Los medias de comunicación, organizaciones civiles y empresarios que vivían del saqueo, son los que hoy hablan de polarización y son los mismos que han definido su bando. Se convirtieron como nunca antes, en la principal herramienta de golpeteo al servicio de la oposición política.

La consolidación de la Cuarta Transformación de la vida pública de México, consiste en culturizar la democracia como una forma de vida, incorporar a la clase política conservadora al proceso de construcción de un nuevo escenario post revolucionario de un México que, recupere la funcionalidad perdida del estado mexicano.

La revolución pacífica ocurrida el 2018, recuperó os ideales pospuestos de justicia social de la revolución mexicana, un sistema de partidos alejados del poder económico, y principalmente, una revolución de la representatividad que voltee la pirámide del poder presidencialista.

La democratización de la vida pública, representada por la izquierda progresista que encabeza AMLO, marcó un abismo de diferencia con la oposición conservadora “neoliberal” que se quedó en un discurso de modernidad que demostró ineficacia tanto teórica política como social, económica como cultural. El sistema neoliberal capitalista fue incapaz de cambiar la realidad de la sociedad que siempre sufre, solo cambió y mejoró la vida de los poderosos.

El principal producto del neoliberalismo es precisamente la corrupción, la misma que provocó la degeneración del poder público y de la clase política. La corrupción es la principal responsable y origen de los males estructurales que históricamente serían insalvables con la política neoliberal que en lugar de castigarla, la alienta.

A la sociedad le urgía resolver en la inmediatez los problemas de la pobreza, la inseguridad y la falta de desarrollo económico sostenido que le augurara una mejor vida a la gran mayoría de los mexicanos que vivían en la incertidumbre económica, existencial y social. Esa sociedad no está dispuesta a permitir que la corrupción le vuelva a arrebatar de las manos su progreso que apenas empieza.

Aunque la oposición le llame autoritarismo, el presidente AMLO debe convocar a un nuevo constituyente que reconfigure el pacto federal, en un pacto entre los municipios, creando la primera república municipalista del mundo, y una revolución de la representatividad de acuerdo a la nueva demografía y psicología del mexicano.

La 4Transformación de México está en marcha… disculpen las molestas pero estamos transformando a México.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *