DESESPERADO, CALDERÓN SE LANZA CONTRA QUIENES PROMUEVEN JUICIO A EXPRESIDENTES
Polemón | POR JORGE GÓMEZ NAREDO 01 SEP 2020
Felipe Calderón anda preocupado. Y es que no es para menos. En las calles, miles y miles de personas se organizan con un solo fin: que a los expresidentes se les enjuicien. Y si son culpables, que los metan a la cárcel.
La reacción de la gente ha sido enorme. Colas gigantes para firmar. Organización. Gente que imprime su hoja de firma para que, entres sus familiares y amigos, contribuir al juicio contra los ex.
Sí, apenas es una consulta. Sí, no depende de la gente solamente. Sí, están las autoridades judiciales. Sí, no es un hecho que se les vaya a juzgar. Pero eso no importa ahora. Lo que resalta es el clamor de la gente diciendo: “metan a esos ladrones a prisión”.
¿Y cuál ha sido la respuesta de los expresidentes?
Carlos Salinas, callado.
Ernesto Zedillo, callado.
Vicente Fox, callado.
Enrique Peña Nieto, callado.
Felipe Calderón: se va contra sitio web que promueve la junta de firmas.
Sí, el más desesperado es este último, Felipe Calderón.
Ayer, en su cuenta de Twitter, el ex panista se lanzó contra la web juicioexpresidentes.mx, y afirmó que estaba registrada por “el coreógrafo del régimen”, Epigmenio Ibarra. Y no contento con ello, preguntó en tono de burla y mentirosamente (que evidenciaba una enorme preocupación), si allá, en Telaviv, Israel (donde supuestamente él, Calderón, se registró el sitio), Epigmenio guardaba “los millones que debía de impuestos y que le perdonó Andrés Manuel”.
Omar García, uno de los promotores de la junta de firmas para enjuiciar a los expresidentes, respondió y lo hizo con mucho humor: “Gracias a la promoción del sitio”, para después indicar que no se olvidara descargar el formato de junta. Y agregó: “Este señor borracho sería uno de los enjuiciados, y no por borracho”.
Así pues, Calderón, en lugar de rebatir por qué no debe ser él enjuiciado y cuáles son sus argumentos, se lanza contra el sitio web que promueve la consulta y, además, contra Epigmenio Ibarra, que es un simple ciudadano.
No cabe duda: se huele la desesperación del ex mandatario que, en 2006, ganó la presidencia vía un fraude electoral.
